/para que no me vean llorar
seré agujero negro deglutiendo olvidos.
Sísifo enjuto de pesares
cargo con un amor a cuestas
que vuelve una y otra vez
sobre mi cuerpo.
Y no aprendo.
Quizás no quiera
/o no pueda /
entender que el hoy es calco del mañana.
cargo con un amor a cuestas
que vuelve una y otra vez
sobre mi cuerpo.
Y no aprendo.
Quizás no quiera
/o no pueda /
entender que el hoy es calco del mañana.
Liliana
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Me llenaré de ti
a lo mejor no entiendes
que el mañana es arena entre los dedos
que la oquedad del olvido no existe
que un amor cuando es amor
de esos que se funden en uno
por más que se sacuda al alma
se quedan prendados del recuerdo
corre la lágrima furtiva
-es verdad-
guinda de los labios el adiós
y éste
al caer en la vaciedad del tiempo
sucumbe en el regreso
del beso que quedó pendiente
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Me llenaré de ti
a lo mejor no entiendes
que el mañana es arena entre los dedos
que la oquedad del olvido no existe
que un amor cuando es amor
de esos que se funden en uno
por más que se sacuda al alma
se quedan prendados del recuerdo
corre la lágrima furtiva
-es verdad-
guinda de los labios el adiós
y éste
al caer en la vaciedad del tiempo
sucumbe en el regreso
del beso que quedó pendiente
Migdalia
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VACIARÉ MI ALMA
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VACIARÉ MI ALMA
Vaciaré mi alma.
De las huellas que marcan,
ese pasaje entre el amor y el olvido.
Buscaré el sosiego de los idos.
Desarmando de a partes y a sabiendas,
mi cuerpo.
Sí, desprenderme
de todo rasgo humano y de mujer.
Tal vez así evitaré la repetición.
El hastío perpetuo.
En la desidia del ser
encontré el refugio impreciso.
Del olvido.
Este amor escogió ser desigual.
Para ti,
mis besos y mi ser siempre son mudables
Para mí,
el amor que siento siempre será fijo.
Vaciaré mi alma,
vertiendo vacío.
Detrás de los barrancos escarpados
que se extienden más allá de mis ojos
que se erigen sobre un precepto repetido e infinito.
El tiempo no es más que un sueño ilegítimo.
Y el amor, un habitante energúmeno de mi destino.
De las huellas que marcan,
ese pasaje entre el amor y el olvido.
Buscaré el sosiego de los idos.
Desarmando de a partes y a sabiendas,
mi cuerpo.
Sí, desprenderme
de todo rasgo humano y de mujer.
Tal vez así evitaré la repetición.
El hastío perpetuo.
En la desidia del ser
encontré el refugio impreciso.
Del olvido.
Este amor escogió ser desigual.
Para ti,
mis besos y mi ser siempre son mudables
Para mí,
el amor que siento siempre será fijo.
Vaciaré mi alma,
vertiendo vacío.
Detrás de los barrancos escarpados
que se extienden más allá de mis ojos
que se erigen sobre un precepto repetido e infinito.
El tiempo no es más que un sueño ilegítimo.
Y el amor, un habitante energúmeno de mi destino.
Amparo
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A lo mejor no entiendo
que un futuro muerto
entre bambalinas aguarda,
que la arena se filtra
en las grietas del corazón.
Vaciaré mi alma
de todo paso mal dado,
Icaro consumido
en un fugaz atardecer
el "adiós" perfumará el horizonte
/que no pude ni supe otear.
Recicladas lágrimas mojarán
un nuevo intento-fracaso
de independencia.
Liliana