Este rincón es para mis amigos y yo. Aqui están todas esas producciones entre escritores que nos ayudan a crecer literaria y humanamente.

Sólo queda ésto//Liliana-Migdalia Mansilla-Julia del Prado-Elisabet Cincotta- María Fischinger

Sólo queda esto : el embriagar la poca cordura
obliterar la razón doquiera sea
y pretender que el tiempo todo lo desmienta
/o lo confirme.
Migajas de esperanza bordeando sangrientos ríos
hundiéndose en el sedimento de la rutina
arrumbándoseme en las pupilas del ahogo
/sin salvavidas .
Y la Fe
¡ah! esa fe que todo lo puede/y lo quiere
agonizando en el incierto aleteo de una mariposa
/nunca sueño de emperador.
Y la espera
la insolente vampiro que succiona las horas sin permiso
/y sin perdón
esquivándome el ahora sin después.
Sólo esto queda: el arrebato fugaz
de un instante de placebo placer,
el último deseo de un condenado a morir
/o vivir por siempre así.


Liliana

---ººº---


Sólo queda

sólo queda
en las hojas mustias
del calendario
de la vida
el restañar la locura
en medio del pecho
guardar la guadaña
que arrancó de cuajo
a la esperanza
y seguir descalza
camino al sol
sólo queda /luego
la memoria
en el olvido

Migdalia B. Mansilla R.

---ººº----

Sólo queda
el destello
la fuga
el camino adquirido
en batallas calzadas
de mariposas en trazos
y luciérnagas lucidas
para que ese monte
no se haga trizas
y el sol muestre
sus holas
en arte de
buenos días.

Julia del Prado (Perú)

---ººº---

Solo queda enaltecernos
derribar murallas
socavar el día

mirar el espejo
descubrirnos
saber que fuimos

que siempre fuimos

si el encanto tiñó oscuridades
obscenos refugios para la mentira
quebrar el hechizo maligno

es necesario

ofrendar mariposas luces de verano
calzar en el grito la talla alegría

más tarde el olvido ceñirá
la cintura de la memoria

es inevitable

que solo quede de nosotros
el embrujo de haber sido palabra
de balbucear poesía

Elisabet Cincotta


---ººº----

Ayer
una víbrate cuerda disonante
de un desconcierto

Hoy
un manojo de pétalos descoloridos y secos
de un recuerdo

Mañana
Una tenue y solitaria brisa que recorre
un desierto




María Fischinger

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